viernes, 12 de octubre de 2012

GUERRA DE REFORMA


a Guerra de Reforma, Historia de México

La Guerra de Reforma, Historia de México
La Guerra de Reforma de México, conocida también como Guerra de los Tres Años, ocurrió del 17 de diciembre de 1857 hasta el 1 de enero de 1861. Este conflicto armado consistió en el enfrentamiento entre liberales y conservadores; la situación era tan tensa que se llegó a impedir el respeto a los artículos constitucionales relativos a las garantías individuales mientras continuase la inestabilidad del país. Culminando cuando el general conservador Félix Zuloaga dio a conocer el Plan de Tacubaya. Este plan exigía la abrogación de la Constitución de 1857, la permanencia de Ignacio Comonfort en la presidencia y a convocar un Congreso extraordinario. Dicho Congreso se encargaría de redactar otra Constitución, que según los conservadores “garantizara los verdaderos intereses del pueblo”.

Ignacio Comonfort, Presidente electo, se adhirió al Plan de Tacubaya mientras Benito Juárez, Presidente de la Suprema Corte de Justicia, defendió la Constitución vigente y se negó a colaborar con los conservadores; por lo cual Comonfort ordenó que se arrestara y mantuviera en prisión.

Este conflicto entre las autoridades permeó a todas las esferas de la sociedad, causando una profunda polarización. Por un lado, los moderados se unieron a los liberales defendiendo su ideal de acotar el poder económico y político de la Iglesia Católica. El gobierno llegó a tener dos sedes paralelas, el conservador en la Ciudad de México y el liberal en Veracruz.

El fin de la guerra le concedió el triunfo a los liberales y el Presidente Benito Juárez instauró su gobierno en la Ciudad de México. El Congreso Constituyente elaboró una nueva constitución y se realizaron elecciones para poderes federales y estatales. Las legislaturas estatales configuraron las constituciones de cada estado de acuerdo con la Constitución nacional. El primer Congreso Constitucional trabajó bajo estos principios a partir de 1857.

Cada estado de la República decidió su postura, dividiendo al país en dos: los que apoyaban
GUERRA DE REFORMA
El 19 de enero de 1858, Juárez estableció su gobierno en Guanajuato, organizó su gabinete y publicó un manifiesto que dio inicio a la Guerra de Reforma:
El Gobierno constitucional de la República, cuya marcha fue interrumpida por la defección del que fue depositario delpoder supremo, quedó establecido.
En la capital, una junta de representantes nombró presidente a Félix Zuloaga el 22 de enero, quien tomó posesión al día siguiente. De esta manera hubo dos gobiernos en el país, uno reaccionario en la capital y otro liberal en el interior. Zuloaga estableció las Cinco Leyes, por las cuales se derogaban las leyes reformistas y se restablecía la organización de la Suprema Corte de Justicia de la época de Santa Anna con el fin de organizar un gobierno conservador.
En el primer encuentro en Salamanca, las tropas liberales sufrieron una seria derrota. El 13 de marzo una parte de la guarnición de Guadalajara se pronunció por el Plan de Tacubaya y Juárez fue hecho prisionero en el palacio de gobierno; a punto de ser fusilado le salvó la vida la elocuencia de Guillermo Prieto, que habló a los soldados de la enormidad del atentado que iban a cometer, diciéndoles " los valientes no asesinan ".
LEYES DE REFORMA
Las llamadas "Leyes de Reforma" fueron dictadas por Juárez en Veracruz entre julio de 1859 y diciembre de 1860. En el contenido de ellas se puede observar la radicalización del pensamiento político liberal, pues muestran el propósito de limitar el ejercicio de la actividad eclesiástica sólo al campo espiritual. Entre ellas destacaron:

1.- Nacionalización de los bienes del clero (julio 12 de 1859)
 2.- El matrimonio como contrato civil (23 de julio de 1859)
3.- Ley sobre el estado civil de las personas (julio 28 de 1859)
4.- Ley sobre cementerios (31 de julio de 1859)
 5.- Ley que decreta los días festivos y prohibe la asistencia oficial a las funciones eclesiásticas (11 de agosto de 1859).
6.- Ley sobre Libertad de Cultos (4 de diciembre de 1860)
LAS CONSECUENCIAS
Graves repercusiones internacionales tuvo para nuestro país el estallido de la Guerra de Reforma. España, viéndonos debilitados y en una gran penuria, impuso un tratado ruinoso. El 26 de septiembre de 1859 se firmó en París el Tratado Mon-Almonte por Juan Nepomuceno Almonte, a nombre del presidente conservador Zuloaga, y por Alejandro Mon, a nombre de Isabel II, Reina de España. El propósito de este tratado era buscar apoyo para establecer un protectorado español en México, poniendo fin a la guerra de reforma con un triunfo para el bando conservador.
Por otra parte, el bando liberal representado por Melchor Ocampo firmó un tratado con el representante del gobierno americano, Roberto Mc Lane, el 1° de diciembre del mismo año con el propósito de buscar apoyo para la causa liberal . Contenía cesiones y concesiones y México cedía a los Estados Unidos el derecho de tránsito a perpetuidad por el Itsmo de Tehuantepec y en varios puntos del Norte de nuestro país, derecho para poder emplear, en caso de peligro inminente, las fuerzas de la nación vecina en la protección de los ciudadanos norteamericanos, y para resguardar, si fuese necesario, la frontera Norte, tránsito de tropas por el Itsmo de Tehuantepec y por otras vías en el territorio nacional, introducción de mercancías al más módico tipo de derecho o exentas del mismo. Los Estados Unidos estaban interesados en intervenir en México. El Itsmo de Tehuantepec era deseado tanto por Inglaterra como por los Estados Unidos. Para los Estados Unidos era una vía corta entre los dos océanos. Ninguno de los dos tratados logró los propósitos deseados, el primero porque se anuló con el triunfo liberal y el segundo porque no fue ratificado por el senado de los Estados Unidos.

Guerra de Reforma

Guerra de Reforma
Fecha1857-1861
LugarMéxico
ResultadoVictoria liberal
ConsecuenciasSegunda Intervención Francesa en México
Beligerantes
Flag of Mexico (1823-1864, 1867-1968).png LiberalesFlag of Mexico (1823-1864, 1867-1968).png Conservadores
Comandantes
Ignacio Zaragoza
Jesús González Ortega
Santos Degollado
Leonardo Márquez
Miguel Miramón

Unos 8.000 muertos en total.1
La Guerra de Reforma de México –también conocida como la Guerra de los Tres Años– que transcurrió desde el 17 de diciembre de 1857 hasta el 1 de enero de 1861, fue un conflicto armado que enfrentó a los dos bandos en que se encontraba dividida la sociedad mexicana: liberales y conservadores.
Se inició cuando el general conservador Félix Zuloaga dio a conocer el Plan de Tacubaya en diciembre de 1857, que demandaba la derogación de laConstitución de 1857 (que lastimaba los privilegios del clero), cuestionaba la permanencia de Ignacio Comonfort en la presidencia y lanzaba la convocatoria de un Congreso extraordinario, el cual se encargaría de elaborar otra carta constitucional que garantizara los verdaderos intereses del pueblo mexicano que, en ese momento de la historia, según los conservadores, era profundamente católico. Dos días después de su publicación, Comonfort (Presidente electo en ese momento) se adhirió al Plan de TacubayaBenito Juárez (Presidente de la Suprema Corte de Justicia en ese momento) defendió enérgicamente la Constitución y se negó a colaborar con los conservadores.Por esta razón, Comonfort ordenó que lo detuvieran y lo mantuvieran en prisión. Por un tiempo los liberales y conservadores tuvieron gobiernos paralelos, con la sede del gobierno conservador en la Ciudad de México y los liberales en Veracruz.
Al siguiente mes, el Plan de la Ciudadela reafirmaba ese propósito. Desde entonces hasta mediados de 1860 el territorio del actual Estado de Méxicoestuvo bajo el control de los conservadores. De tal manera irían fungiendo varios gobernadores conservadores. Entonces trató de sostenerse un gobierno peregrino del Estado de México, siendo el de Michoacán asilo de ese gobierno y fuente de provisiones para los guerrilleros mexiquenses. Tanto liberales como conservadores tuvieron desavenencias internas. Efecto y causa de ellas fue el pronunciamiento de Ayutla en el Estado de México en diciembre de 1858.
Estando en Michoacán, el liberal Sabás Iturbide Rojas dejó la gubernatura del Estado de México a Simón Guzmán. Tocó a éste apoyar la campaña de Miguel Blanco, quien pretendía tomar Toluca y aun sorprender la Ciudad de México. Éste y otros intentos se frustraron hasta mediados de 1860, cuando Berriozábal logró enseñorearse del valle de Toluca. Este avance fue uno de los pasos que prepararon la resonante batalla de Silao, ganada por los constitucionalistas. A ella concurrió Berriozábal con la división del Estado de México. Sin embargo, una vez que retornó a Toluca, fue sorprendido por Miramón, quien penetró audazmente hasta el centro de la ciudad; mas fue pasajera la hazaña conservadora, pues el 22 de diciembre de 1860 Miramón fue derrotado en San Miguel Calpulalpan, al noroeste de la entidad, por González Ortega.
Sin embargo, las gavillas conservadoras siguieron por el rumbo de Malinalco, sobre todo en la sierra que va del Monte de las Cruces aVilla del Carbón, asestando duros golpes, significativos por la muerte de importantes personalidades del partido constitucionalista:Santos Degollado en los Llanos de Salazar el 15 de junio de 1861 y Leandro Valle, a los ocho días, en el Monte de las Cruces.
La guerra terminó con la victoria de los liberales y el presidente Benito Juárez instaló su administración en la Ciudad de México. Una vez que el Congreso Constituyente había cumplido con su tarea de elaborar una nueva constitución, se hizo la convocatoria para realizar elecciones tanto de los poderes federales como los de los estados; tocó entonces a las legislaturas estatales el arreglo de las constituciones particulares de cada estado, de acuerdo con la constitución general. Se reunió así el primer Congreso Constitucional que trabajaría ya bajo los principios de la carta magna del 1857.
El 12 de octubre de 1861 la legislatura del estado culminaba la elaboración de una nueva Constitución, acorde con la federal del 57, aprovechando las lecciones del pasado, las luces de los legisladores que nos han precedido en los bellos y apacibles días de nuestra infancia social e independiente y las no pocas que brotando del seno mismo de los combates, han ilustrado a las masas después de la última revolución de principios.
La Constitución del 61 buscó balancear mejor los poderes públicos, prescribió la mayoría absoluta en la discusión y votación de leyes, redujo los periodos de sesiones del legislativo, amplió las facultades municipales y exigió la residencia en el estado para ser diputado, sin requerirlo en cambio para la gubernatura.

Contenido

  [ocultar

[editar]Antecedentes

Después, en 1857, la situación llegó a ser delicada, mientras tanto que este primer Congreso Constitucional, que había elegido a Comonfort presidente de la República y a Benito Juárez presidente de la Suprema Corte de Justicia, confirió al Ejecutivo facultades extraordinarias para gobernar. El temor de los hechos impidió incluso que se respetaran los artículos constitucionales relativos a las garantías individuales en tanto continuara la inestabilidad, la cual más que disminuir aumentó en una de las guerras más cruentas del país.
Durante la amenaza de golpe de Estado en el país y la debilidad del presidente para actuar firme y decididamente, precipitó el estallamiento franco de la lucha. En diciembre de 1857 se proclamó el Plan de Tacubaya en el que se estipulaba que cesaba de regir la Constitución y que Comonfort seguiría al frente del Ejecutivo, gobernando con amplias facultades; convocaba a un congreso extraordinario que redactaría una nueva constitución de acuerdo con la voluntad nacional, cesando entre tanto a todas aquellas autoridades que no secundasen este plan.
Presionado por las circunstancias, depués Comonfort decidió unirse a los sublevados. Parte de su equipo de colaboradores renunció a sus puestos mientras que Benito Juárez, presidente de la Suprema Corte, Isidoro Olvera, presidente del Congreso y algunos diputados fueron conducidos a prisión. Los estados de la República se dividieron en aquellos que apoyaban al Plan de Tacubaya y los que defendían el orden constitucional.
Los conservadores, por su parte, presionaron a Comonfort para que derogara las reformas liberales, a lo cual él se negó. Luego, trató de buscar una reconciliación con el ala liberal; excarceló a Juárez y llevó a cabo enfrentamientos armados contra los conservadores, en los cuales saldría mal librado. Ante lo inútil de su resistencia decidió no continuar en la lucha y abandonó el país dejándolo inmerso en una guerra civil.

[editar]Guerra Civil

En consecuencia se dan dos gobiernos paralelos. Uno encabezado por Benito Juárez que en su calidad de presidente de la Suprema Corte debía ocupar el Ejecutivo en caso de que el presidente se ausentara; y el otro presidido por Félix Zuloaga, a quien una junta de representantes había electo presidente. El primero defendería el orden constitucional, mientras el segundo se encaminaría a su destrucción. Juárez estableció su gobierno, en un primer momento, en Guanajuato, mientras Zuloaga en la capital gobernaba con las llamadas Cinco Leyes, que de hecho derogaban algunas de las reformas liberales como la Ley Lerdo, la Ley Iglesias y la Ley Juárezentre otras. Las diversas entidades del país tomarían una posición y defenderían a uno de estos dos gobiernos.
El ejército y el gobierno liberal irían sufriendo severas derrotas a manos de los conservadores, en Puerto de CarretasAtenquique,Ahualulco y Barranca de Beltrán, bajo el mando, en la primera batalla, de Luis G. Osollo y del general Miguel Miramón tras la muerte de aquél, derrotas que llevaron a Juárez a convertir su mandato en itinerante. Con todo y las penalidades a que se vio sujeto, éste continuó dictando una serie de disposiciones legislativas que simbolizaron una postura aún más radical que la manejada en el congreso constituyente de 1857. La legislación dictada en Veracruz modificó sustancialmente diversos aspectos centrales de la vida nacional.

[editar]Leyes de Reforma

Las leyes decretadas por Juárez en Veracruz, mientras se encontraba sitiado dicho puerto, conocidas como Leyes de Reforma, establecieron al fin la separación de la Iglesia y el Estado. El 12 de julio de 1859 se promulgó la Ley de nacionalización de los bienes eclesiásticos; el 23, la Ley del matrimonio civil; el 28 la Ley orgánica del Registro Civil y la Ley sobre el estado civil de las personas; el 31, el decreto que declaraba que cesaba toda intervención del clero en cementerios y camposantos. El 11 de agosto se reglamentaron los días festivos y se prohibió la asistencia oficial a las funciones de la Iglesia. Un año más tarde, el 4 de diciembre de 1860, se expidió la Ley sobre libertad de cultos. Este conjunto de leyes fueron el inicio de una nueva era en la política, la economía y la cultura.
Pero mientras esos ordenamientos se convertían en realidad, la guerra civil había agotado y empobrecido al país. Un hecho externo determinó el resultado de la contienda y daría un giro radical a los acontecimientos: en 1859, el gobierno de Estados Unidos representado por James Buchanan reconoció al de Juárez y lo proveyó de grandes recursos materiales y económicos; el jefe del gobierno conservador, el general Miguel Miramón, sabedor de la gran influencia estadounidense en la política mexicana, promovió infructuosamente una conciliación entre ambos bandos.

[editar]Conclusión

Después de tres años de guerra civil, las fuerzas liberales encabezadas por el general Jesús González Ortega, enfrentaron la que sería la última batalla contra las fuerzas conservadoras dirigidas por Miramón el 22 de diciembre de 1860. Los liberales vencieron a los debilitados conservadores definitivamente en la Batalla de Calpulalpan en el Estado de México el 22 de diciembre de 1860, y finalmente el 1 de enero de 1861, Juárez hizo su entrada triunfal a la capital.
Poco tiempo antes de que esto sucediera, pero convencido ya de la victoria de las fuerzas constitucionalistas sobre las reaccionarias, Juárez expidió el 6 de noviembre de 1860, una convocatoria para las elecciones de diputados al Congreso de la Unión y para Presidente constitucional de la República en un plazo de dos meses. El presidente había venido gobernando con facultades extraordinarias, por lo cual le era apremiante restablecer la legalidad del gobierno a través del Congreso. Para este momento, el poder legislativo había inclinado el peso de la balanza a su favor constituyéndose sin duda en la fuerza política más importante del momento, por encima incluso del Ejecutivo. Este, por su parte, necesitaba triunfar en las elecciones para poder gobernar dentro del orden constitucional.
Tras una votación muy cerrada, el gobierno juarista apenas pudo triunfar con unos votos de diferencia. El Congreso declaró presidente constitucional a Benito Juárez y a González Ortega presidente de la Suprema Corte de Justicia, cargo que llevaba implícito ser el sustituto legal del presidente.
Las sesiones en la cámara transcurrieron en medio de una gran tensión política, la cual obligó al presidente a suspender algunas de las garantías individuales consignadas en la Constitución. Una vez que se restableció el orden constitucional a nivel nacional, se buscó la manera de sostener las leyes dictadas en Veracruz y se expidieron algunas nuevas, como el decreto por el que quedaron secularizados los hospitales y los establecimientos de beneficencia, emitido en diciembre de 1861.
Estos nuevos ataques a los intereses conservadores provocaron levantamientos por parte del ejército reaccionario. A pesar de haber sido derrotado por los liberales, Zuloaga hizo un nuevo pronunciamiento declarándose presidente de la República. La inquietud política se volvió a desatar y produjo fuertes enfrentamientos partidistas, incluso contra el presidente Juárez, que se esforzaba por mantenerse dentro del orden constitucional.
Sin embargo, los asesinatos de Melchor Ocampo y de Santos Degollado, en 1861 llevados a cabo por las guerrillas conservadoras, contribuyeron a que la situación política, económica y social se tornara crítica. El gobierno juarista decidió suspender pagos, buscar la forma de allegarse recursos por cualquier medio y mantener la suspensión de garantías. Estas medidas resultarían insuficientes para resolver los problemas financieros existentes y lograr la pacificación del país.

[editar]Consecuencias

Con el fin de conseguir más recursos para frenar la guerra y arreglar la Hacienda Pública, el Ejecutivo tuvo que tomar medidas drásticas. La presentación ante el Congreso de una iniciativa de ley para suspender los pagos de deudas y obligaciones extranjeras durante dos años, fue el corolario a la angustiosa situación. Discutida en el seno de la Asamblea Legislativa, la iniciativa fue aprobada y se publicó en julio de 1861. La respuesta de las potencias afectadas fue inmediata y aunque la disposición se derogó en noviembre de ese mismo año, fue demasiado tarde pues la actitud asumida por los gobiernos extranjeros presagiaba el inicio de la Segunda Intervención Francesa en México.

[editar]

No hay comentarios:

Publicar un comentario